Younes Baba-Ali (marr)
Younes Baba-Ali hace arte poco convencional, inteligente y crítico, principalmente en espacios públicos o lugares poco comunes para la práctica del arte. Es un observador agudo y plantea cuestiones pertinentes dirigidas a la sociedad, a la institución y sobre todo a su público. Como libre pensador, muestra a la sociedad como un espejo y la confronta con sus hábitos y disfunciones arraigados. El trabajo de Baba-Ali a menudo asume la forma de un ready-made, pero debajo de su fachada de simplicidad hay un complejo ejercicio de equilibrio en el trabajo. Como artista-alquimista mide y mezcla tecnología, objetos, sonido, video y fotografía con cuestiones políticas, sociales y ecológicas. Las instalaciones resultantes coaccionan discretamente al espectador desprevenido a tomar una posición. Baba-Ali no evita las controversias y a menudo se encuentra negociando su arte y su razón de ser con su entorno. Sus obras son específicas del contexto y toman su forma final en diálogo con sus espectadores. Este arte de intervención, a veces disruptivo, confronta al espectador de una manera irónica consigo mismo y su entorno. Baba-Ali presenta dilemas y tabúes a las personas y las desafía a actuar. De esta manera los convierte en sus cómplices en actos de guerrilla artística que unen al establecimiento y al hombre común.
Younes Baba-Ali makes art that is unconventional, intelligent and critical, mostly in public space or places uncommon to art practice. He is a sharp observer and raises pertinent questions aimed at society, the institution and above all, his audience. As a free thinker he holds a mirror up to society and confronts it with its ingrained habits and dysfunctions. Baba-Ali’s work often assumes the form of the readymade, but underneath its facade of simplicity there is a complex exercise in balance at work. As an artist-alchemist he measures and mixes technology, objects, sound, video and photography with political, social and ecological issues. The resulting installations discreetly coerce the unsuspecting viewer into taking a stand. Baba-Ali shuns no controversy and often finds himself negotiating his art and its rationale with his environment. His works are context-specific and take their final form in dialogue with its spectators. This at times disruptive intervention art confronts the viewer in an ironical way with himself and his environment. Baba-Ali presents people dilemmas and taboos and challenges them to (re)act. In this way he makes them his accomplices in acts of artistic guerrilla that unite the establishment and the common man.